La generación de energía tiene impactos ambientales. Por ello, ahorrar energía ayuda a reducir el impacto ambiental y contribuye a combatir los efectos del calentamiento global y del cambio climático. Asimismo, las acciones de eficiencia energética hacen que los gastos en energía disminuyan. Recuerda que no hay energía más limpia y barata que la que no se consume.

• Si abres las persianas y las cortinas, entrará más luz, aprovechando de esta manera la luz natural.
• Optimiza el uso de energía, apaga las luces siempre que no se necesiten, especialmente en estancias vacías.
• Opta por lámparas fluorescentes de bajo consumo y tubos fluorescentes finos. Así conseguirás ahorrar un 50% de energía y su duración será hasta diez veces superior.
• No olvides apagar la calefacción, el aire acondicionado, el climatizador y otros aparatos. Cuando están en modo “stand by” siguen consumiendo energía.
• En tu ordenador activa las opciones de desconexión. Si te vas para regresar en un breve periodo de tiempo, apaga al menos el monitor del ordenador.
• A la hora de comprar nuevos equipos, presta atención al etiquetado energético y adquiere los más eficientes (clase A o B).
• Cuando la calefacción o el aire acondicionado estén en marcha, asegúrate de que las ventanas y las puertas estén bien cerradas.
• Utiliza la calefacción y el aire acondicionado de forma responsable. Para el aire acondicionado 25°C es suficiente para sentirse cómodo y para la calefacción, se considera una temperatura ideal 20°
• Con cada grado de temperatura más en el aire acondicionado y con cada grado de temperatura menos en la calefacción, se ahorra hasta un 10% más de energía.