Históricamente, los pequeños humedales se consideraban terrenos baldíos insalubres, por ello, muchos se desecaron y rellenaron con sedimentos para convertirlos en suelo firme donde se amplió el terreno edificado. La pérdida de humedales a escala mundial, se estima en un 64% desde el año 1900. El Día Mundial de los Humedales, celebrado el pasado 2 de febrero, recalcá la importancia de estos ecosistemas acuáticos que actuan como filtros naturales, mitigan inundaciones, proporcionan hábitats vitales para diversas especies y contribuyen a la salud del ecosistema global. El ayuntamiento de Bilbao viene realizando una serie de actuaciones para ampliar la red de pequeños humedales presentes en la ciudad y fomentar su conservación. En las inmediaciones de la cantera de Artxondoko se crearon dos encharcamientos, tanto en el Parque de Huertas de Otxarkoaga, Recalde y Artxanda se habilitaron microhumedales y en el Parque Etxebarria y Europa en 2023 se dispuso un estanque. Poco a poco estos ecosistemas acuáticos se están naturalizando acogiendo las especies nativas ligadas a estos ambientes: anfibios, libélulas y caballitos del diablo.