¿Ahorrar mientras ayudamos al medio ambiente?

En los meses de invierno, el frío impulsa el consumo de energía en calefacción y otros sistemas, lo que puede aumentar las facturas y la huella ambiental. Aquí tienes algunos consejos para ahorrar en el hogar y reducir el impacto ambiental sin perder confort:

  1. Optimiza la calefacción:
  • Ajusta el termostato: La temperatura ideal en casa es 19-21°C de día y 16-18°C por la noche. Cada grado extra supone un 7-10% más de gasto energético.
  • Aprovecha el sol: Abre cortinas y persianas en horas de luz para calentar naturalmente los espacios.
  • Evita pérdidas de calor: Usa burletes en puertas y ventanas para evitar fugas de calor.
  • Mantén los radiadores libres: No los cubras con ropa ni muebles para que el calor se distribuya mejor.
  1. Cocina con eficiencia
  • Usa la tapa en las ollas: Ahorras hasta un 30% de energía al cocinar.
  • Aprovecha el calor residual: Apaga el horno o la vitrocerámica unos minutos antes de terminar la cocción.
  • Evita abrir el horno constantemente: Cada vez que lo haces, pierde un 20% de su calor.
  1. Controla el consumo eléctrico
  • Cambia a LED: Son hasta un 80% más eficientes y duran mucho más.
  • Desenchufa los electrodomésticos en stand-by: Un consumo fantasma que puede representar el 10% de la factura eléctrica.
  • Aprovecha tarifas nocturnas: Si tienes discriminación horaria, usa lavadora y lavavajillas en horarios de menor coste.
  1. Agua caliente con cabeza
  • Ducha corta y eficiente: Cada minuto menos en la ducha puede ahorrar hasta 8 litros de agua caliente.
  • Temperatura ideal en el termo: Ajustarlo a 50-55°C ahorra energía sin comprometer el confort.
  1. Textiles y hábitos para reducir el frío
  • Capas de ropa en casa: Mejor que subir la calefacción.
  • Bolsas de agua caliente: Alternativa ecológica a estufas eléctricas para calentar la cama o sofá.
  1. Electrodomésticos eficientes
  • Etiqueta energética A o superior: Si vas a renovar algún electrodoméstico, busca los más eficientes.
  • Usa programas eco en lavadora y lavavajillas, consumen menos agua y electricidad.

Estos cambios no solo benefician el planeta, sino que también pueden ahorrarte hasta un 30% en la factura mensual.